¿Qué debes tener en cuenta si quieres trabajar desde casa?
Trabajar desde casa puede ser más difícil de lo que imaginas. Porque, aunque hay más flexibilidad, te tienes que adaptar a tu propio ritmo de trabajo y requieres de una serie de habilidades entre ellas la disciplina y la constancia para rendir lo que se requiere. Es fácil distraerse cuando trabajas en la oficina, abundan las distracciones poco probables que simplemente no existen en el trabajo en casa. En la oficina, por ejemplo, se puede visitar la cocina de la empresa una vez en la mañana y una vez en la tarde para una taza de café (porque eso es lo que es apropiado), pero en casa, si no hay control, puedes estar golpeando a la nevera cada hora sobre la hora o más. La forma de evitar esto es actuar como si tú casa fuera el centro de una oficina real. Eso significa, sí, bañarse, vestirse y estar presentable para tu jornada de trabajo. De alguna manera, cambias tu mentalidad, y te estás preparando para «ir» a trabajar haciendo más fácil la transición. También se pueden programar tiempos específicos para consultar el correo electrónico, o cuando te llega un aviso de Facebook, abstenerte de iniciar la sesión hasta la hora del almuerzo.
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¿Cuáles son los Riesgos de Trabajar desde Casa?
Aun cuando trabajar desde casa te puede dar mucha comodidad y flexibilidad, hay algunos riesgos potenciales que debes considerar y que te los describimos a continuación.
Habilidades organizacionales dementes
En el trabajo, tienes que mantener tu escritorio limpio para que te lo miren organizado y sin duda, siempre es útil ver la parte superior de tu escritorio. ¿Pero en casa, a quién le importa si recoges el desorden a tu alrededor? Bueno, no caigas en esta trampa, especialmente si trabajas con video llamadas de conferencia que pudieran ser parte de tu rutina. Es fácil que puedas pasar por alto los servicios de limpieza del espacio, lo que utilizas para limpiar el teclado y vaciar tus papeleras cada noche. Por lo que, es tiempo de elaborar la lista en orden de funcionamiento. Sin comunicación cara a cara, es fácil dejar deslizar las cosas a través de las grietas, por lo que tendrás que encontrar maneras de ser tan organizado como te sea posible. Tal vez encuentres que te gustaría escribir cosas en un cuaderno, o quizá prefieras las notificaciones del calendario. Encontrar lo que funciona mejor para mantenerte organizado en la tarea es importante.
La capacidad de Trabajar Solo
Cuando comiences a trabajar desde casa, puedes echar de menos hablar con la gente. Sin duda, la una gran ventaja de trabajar desde casa, además de la flexibilidad, es que te liberas de la política de la pequeña oficina y chismes interminables. Pero una vez que estás en tu oficina en casa, solo, todos los días, podrías comenzar a perder esa camaradería que tenías con tus compañeros de oficina. Es un buen equilibrio tener paz y tranquilidad cuando se necesite, pero también se requiere la interacción con los demás.
El Riesgo de merma de la Habilidades de Comunicación
Cuando se trabaja en una oficina, puedes pedir a tu jefe acerca de los detalles de tu próxima presentación cuando los ves en la cocina de la empresa. Pero si solo ves una luz verde en el chat, porque trabajas a través de la web, dejarle saber a tu jefe virtual si vas a perder una fecha límite o hacer aclaraciones sobre un correo electrónico, tendrás que ser proactivo sobre la comunicación de todos los aspectos de tu trabajo y cualquier pregunta o duda que puedas tener. También ten en cuenta que la comunicación con un equipo de trabajo a distancia requiere una capa adicional de claridad cristalina. Puesto que casi todo se hace vía correo electrónico (y no hay ninguna pista facial o corporal a leer), necesitarás asegurarte de que te refieres a lo que escribes.
El Riesgo a disminuir la Automotivación
Mientras pudieras estar tentado por la flexibilidad de trabajar desde casa, a lanzar una carga de ropa en la lavadora o empezar a trabajar más tarde de lo que está previsto, por encima de todo debes mantenerte motivado. ¿Cómo? Empezar por darte objetivos diarios, semanales o incluso cada hora. Una vez que empiezas a lograrlos, te sentirás productivo y feliz en tu carrera y estarás un paso más cerca de lograr tu propio equilibrio de trabajo y vida. Trabajar desde casa puede ser el Santo Grial, pero tienes que saber en lo que te estás metiendo. Pero si lo haces, y haces un plan para adquirir estas habilidades, puedes trabajar desde casa, también.
¿Cómo se pueden lograr disminuir los riesgos?
Un riesgo es una situación potencial que puede ser una amenaza tanto para tu salud como para tus proyectos de vida. Así que en este caso, podemos disminuir los riesgos de trabajar desde casa organizándonos adecuadamente, no olvidándonos que aunque requerimos trabajar más solos, la interacción con el entorno sigue siendo vital para nuestra salud mental. Igualmente si estamos trabajando usando la internet y las redes, tenemos que ser muy proactivos y creativos para aumentar la comunicación efectiva de manera virtual. De igual manera, tenemos que evitar la tentación de que en el tiempo que tenemos para trabajar evitar hacer otros asuntos que no sean los que hemos planificado en nuestra agenda de trabajo diaria.
Problemas que se pueden presentar si quieres trabajar desde casa
Uno de los problemas puede ser convertir nuestro hogar en la oficina, olvidándonos que debe existir un equilibrio entre el trabajo y la actividad del hogar. También se puede tener el problema de convertir los espacios de interacción familiar en espacios para colocar y acumular equipos y objetos que son del trabajo.
Recomendaciones finales para que triunfes trabajando desde casa
El trabajo desde casa ha demostrado ser más difícil de realizar de lo que te imaginas. Por un lado, está la organización y disciplina y por el otro está el proceso de la comunicación efectiva. Por lo que se requiere programarse para ser eficiente en el trabajo desde casa. Igualmente, se requiere ser proactivo y muy preciso en la comunicación si se trata de un trabajo desde casa a través de internet.
Te sugerimos, comenzar 30 minutos antes y hacerle saber a tu Gerente de línea o equipo que has empezado a trabajar para el día. Esto es doble. En primer lugar, demuestras responsabilidad y diligencia, y en segundo lugar, muestras que tienes voluntad y motivación para hacer las cosas. Recuerda que, las pequeñas acciones son el camino cierto para mantenerte en la mente de las personas.
