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Requisitos para hacer negocios en Escocia – Contratos e Instituciones

Índice

Instituciones necesarias para hacer un negocio en Escocia

Para cualquier compañía extranjera que empiece a comerciar en Escocia, debe conocer la jurisdicción, eligiendo la estructura comercial más apropiada, lo que será una de las muchas consideraciones importantes. La elección de la estructura tendrá implicaciones fiscales, legales y reglamentarias.

En Escocia existe una diversidad  de estructuras empresariales disponibles, que es similar a la del resto del Reino Unido, sin embargo hay algunas diferencias que deben tomarse en consideración. Una de las más importantes es la Sociedad de responsabilidad limitada que puede ser incorporada en cualquier parte del Reino Unido, pero debe mantener su sede social en el país en el que se constituyó es decir,  Escocia. 

¿Cómo hacer negocios en Escocia?

Hacer Negocios es Escocia

Una sociedad anónima tiene su propia personalidad jurídica y puede ser incorporada con un capital social de tan sólo £1. Igualmente, debe tener al menos una figura, como la del  director (y con sujeción a la legislación propuesta todos los directores) debe ser una persona física, aunque todos los accionistas pueden ser corporales. 

En las corporaciones  se aplican los requisitos de divulgación pública, entre ellos la presentación de las cuentas anuales y la divulgación de los últimos  Beneficiario(s) real(es) bajo las Personas de Control Significativo y régimen. Una sociedad de responsabilidad limitada no puede ofrecer sus acciones de venta al público.

Escocia tiene su propio sistema jurídico basado en el derecho consuetudinario escocés, que se inspira principalmente en el derecho civil romano-holandés. Si bien muchas áreas del derecho son uniformes en todo el Reino Unido, el derecho escocés difiere en varias áreas clave, entre ellas: La propiedad, la seguridad, los fideicomisos, entre otras. 

En muchos casos, las leyes aprobadas por el Parlamento del Reino Unido se aplican en Escocia, incluyendo la legislación sobre sociedades, empleo y la mayor parte de la legislación fiscal. Sin embargo, Escocia tiene la potestad debido a su estructura parlamentaria, de poder de hacer leyes para asuntos descentralizados, tales cómo el gobierno local, la educación, la salud, los impuestos locales, incluyendo tasas de negocios. Igualmente, los impuestos transferidos como el impuesto sobre transacciones de tierras y edificios (LGBTT), el equivalente escocés del impuesto sobre tierras de timbres y estampillas que se aplica a la compra o arrendamiento de tierras y edificios, así como el Impuesto escocés sobre vertederos.

Las tasas del impuesto sobre la renta, las bandas de otros ingresos, y la asignación personal siguen siendo fijadas por el Parlamento del Reino Unido. No obstante, las tasas y bandas del impuesto sobre la renta escocés son actualmente diferentes de las tasas pagadas por los contribuyentes en el resto del Reino Unido.

El Parlamento del Reino Unido conserva la facultad de hacer leyes para asuntos reservados, que incluyen: Comercio e industria, empleo, derechos del consumidor, inmigración, política exterior, la mayoría de los aspectos relacionados con salud y seguridad, no obstante, Escocia tiene su propio sistema judicial y de justicia penal, que difiere del resto del Reino Unido.

Escocia tiene su propio sistema jurídico basado en una combinación de derecho civil y de derecho consuetudinario, y es distinto de los sistemas de otras partes del Reino Unido. El Parlamento y el Gobierno escoceses se encargan de legislar en algunos espacios  jurídicos y políticos. 

Esto incluye algunas áreas que son relevantes para los negocios, aunque la mayoría de los asuntos  más importantes para este campo, son responsabilidad exclusiva del Parlamento y el Gobierno del Reino Unido.

En algunos aspectos, las leyes escocesas difieren de las que se aplican en el resto del Reino Unido. Sin embargo, en muchas áreas del derecho que afectan a las empresas, se aplican las mismas leyes.

Una vez que el Reino Unido deje de ser un Estado miembro de la UE, la legislación de la UE dejará de ser directamente aplicable (posiblemente después de un período de transición/implementación). 

Las Sociedades anónimas privadas o públicas están  limitadas por las acciones. La principal diferencia entre las empresas privadas y las públicas es que las primeras pueden ofrecer sus acciones al público mientras que las segundas no lo pueden hacer. Igualmente, las empresas públicas  están sujetas a una mayor regulación que las privadas. Así mismo, las ventajas de las sociedades anónimas se relacionan con tener una personalidad jurídica separada, y la responsabilidad limitada de los accionistas.

Las acciones pueden ser transferidas (sujetas a cualquier restricción en la constitución de la empresa). Igualmente, las empresas pagan el impuesto de sociedades sobre sus ingresos y ganancias, que actualmente tiene una tasa del 19%, que es inferior a la tasa que pagan las personas de manera individual. Sin embargo, puede haber cargos de impuestos sobre la extracción de beneficios de las empresas.

Las compañías privadas limitadas por acciones son la forma más común del dinamismo de  los negocios utilizados en Escocia.

En este sentido, las empresas extranjeras pueden:

Establecer una filial. Una ventaja es que le da a la compañía extranjera la propiedad y el control del negocio de la subsidiaria, no obstante, tiene las desventajas de los costos iniciales sustanciales cuando la filial se establece mediante la adquisición de una empresa o negocio escocés existente, además de

una gran dependencia de los gerentes locales, todo ello, según sea la experiencia de la empresa extranjera en el mercado escocés.

Requisitos para hacer negocios en Escocia

Establecer una sucursal o una oficina de representación escocesa. Las ventajas de esta figura jurídica es que tiene bajo costo y un proceso simple para establecerla. Por ello,  la sociedad extranjera conserva el control del negocio, y puede ser que la empresa extranjera tenga acceso a las pérdidas sufridas por la sucursal o la agencia.

No obstante, también tiene sus  desventajas y es que, la sucursal no es una entidad jurídica separada y distinta de la empresa extranjera, lo que puede afectar a la disposición de las empresas y los prestamistas locales para hacer negocios, debido a los requisitos de divulgación continua, incluida la presentación de las cuentas anuales de la sociedad en el extranjero.

No hay formalidades para establecer una sociedad general escocesa. Debe haber dos o más personas que lleven a cabo negocios en común con el fin de generar beneficios. No se requiere un acuerdo escrito, aunque normalmente es aconsejable tener uno.

Si todos los socios son (en términos generales) sociedades de responsabilidad limitada (dondequiera que estén constituidas), la sociedad general escocesa debe registrarse en el Registro de Sociedades (Companies House). Debe proporcionarse información sobre las personas con un control significativo. Sin embargo, el registro no es una condición previa para la constitución. En cualquier otro caso, no hay ningún requisito de inscripción.

Las sociedades colectivas escocesas se rigen por la Ley de Sociedades Colectivas de 1890. En ellas se establecen ciertas normas por defecto que rigen las sociedades de personas, que pueden modificarse mediante acuerdo. Las sociedades colectivas escocesas deben observar la ley general en la realización de sus actividades.

Las empresas privadas se rigen por la Ley de sociedades de 2006. Las solicitudes para formar compañías privadas se hacen en el Registro de Compañías (Companies House), y existe un sistema único de registro de empresas en todo el Reino Unido y un único registro de empresas. 

Sin embargo, hay Registradores de empresas separados, tanto en Escocia, Irlanda del Norte, e Inglaterra y Gales. Por lo tanto, el Registro de Sociedades mantiene el registro de sociedades y los  documentos que las empresas deben presentar están disponibles gratuitamente y se pueden buscar en línea en https://beta.companieshouse.gov.uk/.

El Código de Gobierno Corporativo del Reino Unido (promulgado por el Consejo de Informes Financieros, se encuentra también disponible en linea en la dirección web: https://www.frc.org.uk/,  se aplica sólo a las empresas con acciones que cotizan en bolsa. Sin embargo, algunas empresas privadas adoptan voluntariamente algunos de sus principios como un asunto  de mejores prácticas.

En lo relacionado con las visas, Escocia se rige por las mismas normas y legislación sobre visados que el resto del Reino Unido. Hay varias categorías especiales de visados de negocios para asegurar que Escocia siga siendo un destino competitivo para la inversión.

Dependiendo de la razón por la que se viene a Escocia, hay una serie de opciones abiertas a las personas que requieren una visa del Reino Unido.

Algunas opciones son de corto plazo y permiten visitar Escocia para buscar oportunidades de inversión y de negocios, mientras que otras opciones son más permanentes y permiten la reubicación permanente a más largo plazo de inversores y personal clave.

¿Quién necesita solicitar un visado antes de viajar a Escocia?

Algunas nacionalidades necesitan solicitar un visado antes de viajar a Escocia. Por lo que, se puede comprobar si se necesita un visado para el Reino Unido en Gov.UK. Así, las  solicitudes de visado se realizan en los Centros de Solicitud de Visado del Reino Unido.

Igualmente, existen más de 200 centros de solicitud de visados para entrar en el Reino Unido en todo el mundo. El procesamiento prioritario se ofrece en más de 100 de los centros y suele tardar entre tres y siete días. Igualmente, hay  varios países donde también está disponible un servicio de visado de super prioridad, que permite tomar una decisión en un plazo de 24 horas. 

De igual manera, ciertos tipos de visado pueden, con el tiempo, conducir a la residencia permanente en el Reino Unido y este procedimiento es conocido como permiso de residencia indefinida  y eventualmente lleva a la ciudadanía británica.

Acceder a la financiación en Escocia

La  financiación puede ayudar mucho al negocio en Escocia, pero no se trata sólo de dinero. Se deben tomar en consideración aspectos tales como la forma en la que se va a financiar la puesta en marcha del negocio, evaluar también las habilidades  ya sea que planee trabajar desde la casa u otro local, comenzar a tiempo completo o parcial, y también elegir comprar un negocio existente o invertir en una franquicia.

Para acceder a financiamiento en Escocia se requiere realizar algunos procedimientos, tales como:

  • Establecer los procesos adecuados para mantener registros precisos y cumplir con las obligaciones fiscales, de la Seguridad Social y legales.
  • Preparar un plan de negocios para el éxito con pasos fáciles de seguir y una lista de verificación práctica.
  • Encontrar y mantener clientes desarrollando un plan efectivo de marketing y ventas.
  • Evitar los errores comunes al iniciar el proceso. 

En Escocia se pueden contratar expertos en preparación financiera que apoyen al inversionista y le den asesoramiento en la  búsqueda de financiación. También pueden ayudar para acceder a una diversidad de financiación, incluida la financiación bancaria, la financiación de capital y las subvenciones. 

Estos expertos pueden ayudar en la identificación de las necesidades de financiación del crecimiento, para obtener y recaudar la financiación adecuada para el crecimiento con el financiador adecuado, preparar el negocio para acceder con éxito a estos fondos, así como en los pasos de lanzamiento a los inversores. 

Cuáles son los tipos de contrato que se manejan en Escocia

Hay tres tipos principales de contrato en Escocia, que son el contratos de consumo, contratos comerciales y contratos privados. En los contratos de consumo una parte se involucra  en el curso del negocio, la otra parte no. 

Si el contrato implica la compra de artículos, éstos deben ser del tipo que se compra normalmente para uso privado. Por ello, en los contratos de consumo se ofrece una mayor protección a los consumidores porque se consideran que están en una posición más débil que la empresa.

Por otra parte, los contratos comerciales, son contratos en los que ambas partes intervienen en el curso de los negocios. Cualquier contrato entre dos empresas será un contrato comercial.

Los contratos privados son contratos entre dos particulares como la venta de una casa o una compra en Gumtree. Como ambas partes son más o menos iguales, la ley no ofrece ninguna protección especial a ninguna de ellas.

Un acuerdo puede terminar en contrato cuando se cumple una oferta clara con una aceptación inequívoca. Esto no es tan sencillo como podría parecer ya que, la ley reconoce algo denominado invitación a tratar. Esto es simplemente una indicación de la voluntad de aceptar las ofertas.

El ejemplo más común de una invitación a tratar es un artículo en exhibición en una tienda. La etiqueta del precio es una indicación del precio que el vendedor puede aceptar, no una oferta. La oferta se hace realmente cuando la persona se lleva el artículo al cajero que decide si acepta o no la oferta. Por lo tanto, para responder a la pregunta común, un dependiente no está obligado a vender un artículo al precio de la etiqueta, incluso si está mal.

Los anuncios son normalmente invitaciones a tratar a menos que sean tan específicos en sus términos que puedan ser aceptados de inmediato, por ejemplo, cumpliendo con un término específico en el anuncio.

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